viernes, 19 de febrero de 2010

Por la Transparencia

Las personas fuertes crean sus acontecimientos; las débiles lo que les impone el destino
Alfred Victor de Vigny

En estos tiempos violentos que se viven en Zacatecas y el país, la corrupción es la amenaza realmente más fuerte. Ni las armas que mandan los gringos de contrabando, ni las estrategias del gobierno fallido de Felipe Calderón tienen realmente la culpa.
Si todos respetáramos las reglas de convivencia. Si no aceptáramos o promoviéramos las mordidas, por decir algo, la corrupción rampante que tenemos disminuiría un poco. Por eso, la iniciativa de la Contraloría Interna del Gobierno del Estado, encabezada por Julieta del Río Venegas, suena harto interesante.
A partir del próximo martes, las boletas de calificación de los pequeños estudiantes de preescolar y de primaria, y de los jóvenes de secundaria, de las escuelas públicas, estarán disponibles en los kioskos electrónicos. Ya nunca más mentiras, ya jamás falsificar firmas. La transparencia ha llegado a las aulas.
Y es que consultar, en pocos minutos, lo que los hijos hacen en las escuelas, sin intermediarios, resulta ser una medida muy eficaz para que los estudiantes aprendan a ser transparentes desde chicos. A chango viejo no se le enseña maroma nueva. Ni duda cabe.
Y si ya los kioskos habían resultado ser uno de los programas más exitosos de este gobierno, ahora se saca la Contraloría, un 10. La gente está feliz con el hecho de poder pagar su tenencia en minutos; de liquidar su recibo de agua sin tanto trámite. Estos kioskos no sólo ahorran tiempo, también mucho dinero.
Norma Julieta del Río le platicó a los rotarios de Villas de Guadalupe, que los trabajadores más renuentes en aceptar la instalación de los kioskos fueron los de la Junta Intermunicipal del Agua Potable y Alcantarillado (JIAPAZ), área encabezada por Enrique Alcalá.
Y es que según estudios previos realizados por la misma Contraloría, ahí es donde los empleados hacían su agosto. Pedían dinero por no cortar el servicio; por tener el derecho de llegar a las instalaciones y no hacer fila. Bueno, un sinnúmero de linduras más que nunca fueron desterradas de la JIAPAZ. La corrupción y la impunidad, de la mano.
Pero por ese tipo de decisiones es que la contralora tiene que andar siempre con guardaespaldas. Ella tiene una escolta que la acompaña noche y día. Las amenazas de los corruptos se han hecho llegar. Han sido muchos los cayos pisados. Lástima que la funcionaria, este 5 de marzo, aproximadamente, deja el cargo. Va en busca de una nueva aspiración, la diputación local.
Julieta del Río, al igual que Jorge Miranda Castro, fue de las pocas, poquísimas piezas claves con las que contó Amalia García, durante su sexenio. Lo malo fue que la eficiencia de unos contrastó a lo largo de estos casi seis años con la pereza, desidia e irresponsabilidad de otros. ¿NO? Vayan al DIF Estatal y pregunten por el director. Sólo al verlo –se llama Agustín Pineda Aguilar-- se darán cuenta por qué esta dependencia resultó ser de las menos eficaces. Suerte si se animan a ir al DIF. La necesitarán.

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